
En Melilla, todos los sacerdotes y miembros de Cáritas parroquial e interparroquial han decidido de forma significativa aportar su sueldo de un día en la colecta del Jueves Santo. De este modo, quieren dar ejemplo y animar a toda la comunidad creyente y no creyente de la necesidad de compartir fraternalmente lo que somos y tenemos.
También se ha creado un guión litúrgico para la Hora Santa basado en una reflexión sobre la campaña con objeto de tener muy presente en sus oraciones a quienes más están sufriendo las consecuencias de la crisis.