Cooperación

Construcción de dos aljibes en la república de Benín

Con ellos se pretende proveer de agua al Centro de Formación Rural de la república de Benín durante la época seca para sostener una huerta experimental

Una visión rápida del proyecto

  • Localización: República de Benín, un país pequeño del África Occidental, situado en el golfo de Guinea y con una población de poco más de cinco millones de habitantes.
  • Quién lo desarrolla: Fundación KOKARI
  • En qué consiste: Pretende proveer de agua al Centro de Formación Rural de la república de Benín durante la época seca (de noviembre a mayo) para sostener una huerta experimental, para el sustento y cría de animales, y para crear una pequeña alberca que les permita la cría de peces. Para ello, se necesitan construir dos aljibes que permita recuperar las aguas pluviales.
  • Coste total del proyecto: 20.440€
  • Solicitado y concedido por Cáritas Diocesana: 20.440€

Ubicación

La República de Benín es un país pequeño del África Occidental, situado en el golfo de Guinea y con una población de poco más de cinco millones de habitantes. Este país está situado entre los 20 países más pobres del planeta. Su población eminentemente agrícola y ganadera, sufre un índice elevado de analfabetismo, más del 45% de la población. Es una antigua colonia francesa y obtuvo su independencia en el año 1960.

Más sobre el proyecto

La Fundación KOKARI cuenta con un grupo de personas autóctonas, conocedoras perfectamente del medio rural y con una larga experiencia de trabajo como animadores rurales, trabaja en la región que se llama “El Borgou”(15.000 Km.2), una zona de las más aisladas del país, apenas cuenta con medios de transporte público y sus pistas o caminos de tierra pueden recorrerse durante la estación seca, pero en los meses de julio, agosto y septiembre son impracticables debido a la lluvia y a la erosión del terreno. No hay electricidad, ni instalación de agua corriente, solo algunos pozos aquí o allá que, en la época seca, desaparecen. Sin embargo, La naturaleza les regala un montón de agua en la estación de lluvias, agua que se pierde y que erosiona gravemente los terrenos, casas y carreteras.

Con la creación de los aljibes se podría ofrecer a la población, entre otras cosas, alimentos básicos de los que ahora carecen: verdura, carne, pescado, etc. Al mismo tiempo con la canalización del agua de lluvia sobrante se podría evitar la erosión del terreno.  Para la Fundación es una prioridad y un objetivo a corto plazo, buscar y crear los diferentes medios de ingresos que permitan, a largo plazo, la autofinanciación con la venta de la nuez del karité o de anacardos de sus propios árboles, y la venta de la producción de miel de sus colmenas.

El equipo de Cooperación Internacional valoró positivamente este proyecto debido a la excelente estructura de la Fundación KOKARI, con posibilidades y trayectoria para la sostenibilidad futura, por su apoyo a la formación rural, en un país donde la agricultura es la principal fuente de formación, riqueza y trabajo para una población que no tiene otras opciones de desarrollo y por estar en sintonía con el cuidado de la casa común.

El proyecto ejerce un empoderamiento de la cuestión ambiental con la enseñanza de nuevas técnicas de cultivo, cuidado de los campos y formación agrícola sostenible.