Padre Cacho: «Gracias a vuestra ayuda se están salvando vidas»
El padre José Luis Cacho ha visitado los Servicios Generales de Cáritas para agradecer la ayuda que reciben a través de la campaña “Medicamentos para Venezuela”
El padre José Luis Cacho ha visitado los Servicios Generales de Cáritas para agradecer la ayuda que reciben a través de la campaña “Medicamentos para Venezuela” y animar a los malagueños a seguir colaborando con la donación de medicinas. «Quiero aprovechar esta ocasión para decirles que gracias a vuestra ayuda se están salvando vidas», comenzaba diciendo el misionero pasionista, que se encuentra en Málaga celebrando sus bodas de oro sacerdotales.
En su trabajo diario en la parroquia de Fátima, situada en una de las zonas más deprimidas de Caracas, convive con la desesperación de la gente que, como él mismo afirma, «vive con esperanza pero, a la vez, desesperanzada. Es muy doloroso, pero en tan solo dos meses, seis personas de mi parroquia se han suicidado».
«Con un salario medio de 5 dólares mensuales, la gente se ve obligada a vivir en situaciones infrahumanas y no tienen posibilidad de comprar lo imprescindible para tener una vida digna. Allí cuando te vas a operar, tienes que llevar las gasas, la bata, el gorro y todo el instrumental médico necesario. Durante estos años, muchas intervenciones han sido posibles gracias a la generosidad de los malagueños y a los frutos de esta campaña», asegura.
Además de esta ayuda, para tratar de paliar la necesidad más urgente, cada semana se reparten alimentos a más de 700 personas en situación de calle. «Esta gente no tiene para comer. Mayores y niños buscan en la basura. Por daros una cifra, el porcentaje de niños desnutridos alcanza el 60%», afirma el sacerdote.
Junto a los más pobres
Aunque el padre Cacho lleva casi 30 años entregado a su labor misionera (17 años en México y 12 en Venezuela), es un sacerdote muy conocido y querido en Málaga, donde dio sus primeros pasos como párroco de El Buen Pastor, en la Cruz Verde. «He podido ver cómo la gente humilde y sencilla, en cualquier lugar, se apoya mucho. Cuando uno tiene lo justo para comer, comparte con el que no tiene, aunque para mañana no haya nada. También yo os pido que sigáis siendo solidarios y sigáis ayudándonos a sostener nuestro trabajo junto a los más pobres», concluye.
Cómo colaborar
Quienes deseen colaborar, deben tener en cuenta una serie de cuestiones importantes:
- Los medicamentos deben estar en buen estado y no caducados.
- No se envía: material sanitario fungible, líquidos, productos de higiene, pañales o parafarmacia.
- La entrega de material puede realizarse en la Cáritas parroquial más cercana o en los Servicios Generales de Cáritas Diocesana de Málaga, calle Rampa de la Aurora.
- Se puede colaborar con la compra de medicamentos prioritarios, en este caso: paracetamol o ibuprofeno pediátricos, complejos vitamínicos y desparasitantes (adultos y pediátricos).