Dos de cada tres personas voluntarias de Cáritas son mujeres y la mitad tiene entre 45 y 65 años
Cáritas agradece a las personas voluntarias el tiempo y la vida que entregan a diario para acompañar a los que más lo necesitan
El voluntariado es la gran riqueza de Cáritas, pero también de toda la población española. Su entrega gratuita y generosa surge de una sociedad, que sigue considerando la acogida y la apertura a los demás como un valor que orienta nuestras vidas.
Conscientes de este bien compartido, Cáritas Española se une a la celebración del Día Internacional de los Voluntarios, el 5 de diciembre, y agradece a todos sus colaboradores su papel callado y poco visible que hace posible mantener encendida la frágil llama de la esperanza en muchos hogares heridos por la exclusión social o la pobreza.
Cáritas cuenta en la actualidad con 72.447 personas voluntarias. De ese total, dos de cada tres son mujeres y la mitad tienen entre 45 y 64 años. La fuerte opción evangélica de la mayoría de las personas voluntarias explica su larga trayectoria dentro de nuestra organización, ya que uno de cada dos lleva más de seis años.
“Estar cercar, acompañar, cuidar, son señas de identidad de nuestro voluntariado. No se trata solo de hacer, sino también de estar, de escuchar. Lo propio del voluntariado es la ´projimidad´, el vínculo que se va fraguando en la escucha, en el acompañamiento en tramos del camino en los que las personas en situación de exclusión precisan de esa compañía”, explica José Luis Graus, responsable del Voluntariado en Cáritas Española.
Las personas voluntarias son sin duda el corazón de Cáritas. “Representan a esos corredores de fondo -puntualiza- que siguen al lado de las personas cuando superan la primera emergencia y ya no son necesarios los apoyos específicos y especializados”.
No se trata de dar sino de darse
En medio de una realidad compleja y difícil que exige lo mejor de nosotros mismos, el voluntariado nos enseña a mirar la realidad sufriente y a comprometernos con las personas más débiles. Porque no se trata de “dar” -dar tiempo libre o dinero- sino de “darse”, como recuerda el Papa en su mensaje con motivo de la VII Jornada Mundial de los Pobres.
Unidos al Santo Padre, desde Cáritas Diocesana de Málaga queremos dar las gracias a nuestros 1.292 voluntarios por entregar su tiempo y vida a acompañar a los que más lo necesitan, y animamos a quienes aún no han dado el paso a comprometerse e implicarse en la construcción de una sociedad mejor, más justa y fraterna.